Si estás planeando quedarte en los Países Bajos durante más de 4 meses para estudiar o trabajar, tienes que registrarte en la Base de Datos de Expedientes Personales Municipal (Basisregistratie personen, BRP). Esta está situada en la ciudad y debes concertar una cita. Te aconsejamos que lo hagas con antelación, incluso antes de llegar a los Países Bajos, porque no siempre es posible conseguir las citas con rapidez y la espera puede llevar varias semanas. Aquí tienes más información y una guía con todos los documentos necesarios para el registro
Debes registrarte con tu dirección en Holanda. No obstante, no todas las habitaciones o pisos son aptos para un registro de inquilinos (con el que notificas tu residencia de un modo oficial), por lo que debes estar atento y preguntarle siempre al casero si esto es posible.
El número BSN (Burger Service Nummer), es el número de la Seguridad Social y fiscal de Holanda, y es necesario para conseguir un trabajo o abrir una cuenta en un banco. Debes obtener un número BSN en una oficina de impuestos regional tan pronto como llegues a los Países Bajos. Si eres un becario te servirá para que tu empresa te pague tu remuneración.
DigiD es una firma digital o verificación que sirve para utilizar muchas aplicaciones del Gobierno y realizar solicitudes. Con ella te puedes registrar en la página web del Gobierno y presentar, por ejemplo, tu declaración de la renta (si has trabajado) o solicitar una prestación por el seguro médico. Aquí podrás llevar un registro de todas tus actividades en relación con impuestos y registros, o buscar un montón de información útil. Sin embargo, necesitas tener un número BSN. Tras la solicitud en línea recibirás una contraseña que podrás utilizar para activar tu DigiD.
Los estudiantes extranjeros que hayan sido aceptados para programas de estudio de enseñanza superior en los Países Bajos, pueden obtener la residencia holandesa durante el tiempo que dure su curso. Si vienes a los Países Bajos para estudiar durante más de tres meses, tu institución solicitará tu permiso de residencia de estudiante en tu nombre una vez que te hayan aceptado para el curso. Puedes contactar con ellos para obtener más detalles sobre el procedimiento. Échale un vistazo a la guía para visados de estudiantes de Expatica para saber más sobre procedimientos, instrucciones, condiciones y otra información útil.
Si vienes a los Países Bajos como becario o para trabajar, necesitarás un permiso de residencia (además de un permiso de trabajo en algunos casos). Sin embargo, hay algunas situaciones excepcionales en las cuales no lo necesitas. Si puedes obtener una residencia o un permiso de trabajo, es algo que depende de tu situación, el periodo en el que quieras estar en los Países Bajos y el tipo de trabajo que vayas a hacer.
Para obtener una información más detallada según tu situación, puedes acudir a este sitio del Gobierno holandés sobre permanecer o vivir en los Países Bajos. Escoge tu situación (estudiante, trabajador u otra) y podrás consultar todo sobre ella. O bien utiliza esta guía de becarios de Study in Holland, si es tu caso.
Por norma general, si llegas aquí podrás arreglártelas durante algunos días con una tarjeta de crédito o tarjeta bancaria extranjera. Sin embargo, deberías obtener una tarjeta bancaria holandesa tan pronto como te sea posible por muchas razones, pero principalmente porque es más práctico.
Hay un montón de bancos en los que puedes abrir una cuenta siendo extranjero. Rabobank, ING o ABN Amro son todos ellos opciones fiables. Si tienes un número BSN holandés (mira la sección "Registrarse" para saber cómo conseguir uno), puedes escoger cualquier banco que prefieras. Si todavía no tienes un BSN y necesitas abrir una cuenta, tienes la opción de abrirla en ABN o ING.
En función de la duración de tu estancia -y de lo mucho que vayas a usar tu teléfono- hay muchas opciones para obtener un número holandés.
1. Consigue una tarjeta SIM de prepago
La opción más sencilla es conseguir una tarjeta SIM de prepago. Esta solución es fantástica si no vas a permanecer mucho tiempo o si prefieres conectarte a la WI-FI para enviar mensajes por Whatsapp. El inconveniente de esto es que si necesitas llamar o utilizar la conexión de datos, los costes pueden aumentar bastante rápido.
2. Consigue un contrato de SIM suelta mensual
Paga una pequeña cantidad mensual para tener a tu disposición algunos minutos, internet y mensajes de texto. Por alrededor de unos 10 euros puedes conseguir un pack que cubra todas tus necesidades. Proveedores como Tele2, T-Mobile o KPN los ofrecen. La ventaja de estos contratos es que no te obligan a mantener una permanencia de 12 a 24 meses, sino que solamente pagarás los meses que lo necesites, y el resto del tiempo la SIM se desactivará. Sin pago no hay servicios ni cargos. Sin embargo, todavía podrás seguir usando tu número para conectarte a la WI-Fi y utilizar servicios como WhatsApp.
3. Consigue un contrato (¡y un teléfono!)
Si vas a quedarte para más de dos años, plantéate esta opción. Las empresas de telefonía suelen tener buenas ofertas para la compra de uno de sus teléfonos y tarjeta SIM. Con un contrato mensual de alrededor de 30 o 40 euros, podrás obtener 120 minutos, 500 MB/1 GB de internet y mensajes de texto, además de un iPhone 4 o 5, o un modelo de Samsung antiguo.
Para más información, mira en la página web de Phonehouse o en sus tiendas. ¡Tienen en oferta todas las opciones de contrato que hemos mencionado anteriormente!